Organizada por el Instituto de Estudios Avanzados de la Universidad de Estrasburgo (USIAS), la Facultad de Ciencias del Deporte, la Facultad de Ciencias Sociales y el Laboratorio Interdisciplinario de Estudios Culturales (LinCS), esta conferencia internacional multidisciplinar en el ámbito de las humanidades y las ciencias sociales llamó a explorar los cuerpos y su anclaje en las sociedades; las prácticas «tradicionales» y sus adaptaciones; los sistemas de pensamiento y las creencias; los imaginarios y las experiencias corporales; las metamorfosis y las mutaciones tecnocientíficas; las interacciones y los usos sociales; los cuidados y las artes; las problemáticas éticas y las libertades; las vulnerabilidades y las deficiencias, las reconfiguraciones y las adaptaciones, entre otros muchos temas que ha explorado David Le Breton en su carrera.
Se presentaron 58 ponencias a cargo de profesores-investigadores de África, América, Asia y Europa. Las conferencias plenarias corrieron a cargo de reconocidos investigadores de diferentes disciplinas: Dibie Pascal (Francia), Cornet Philippe (Francia), Ghasarian Christian (Suiza), Goguel d’Allondans Thierry (Francia), Jeffrey Denis (Canadá), Laplantine François (Francia), Mercier Michel (Bélgica), Profita Gabriele (Italia), Vandenberghe Frédéric (Brasil) y Vigarello Georges (Francia). Las sesiones plenarias se retransmitieron en directo en el canal de youtube de MISHA: https://www.youtube.com/c/MISHAlsace
La profesora Lorena Hurtado Escobar, del Departamento de Danza de la Facultad de Artes, presentó la ponencia «Cueca sola en Chile: pena, duelo y ritual» en la Sesión: Cuerpo sensible, artes y estéticas 2. La profesora Margarita Iglesias Saldaña, actual directora del Centro de Estudios de Género y Cultura en América Latina, participó con la ponencia «Cuerpo y mujeres en el siglo XVII en Chile» en la Sesión: Cuerpo y género.
Tras 50 años de carrera, David Le Breton, sociólogo y antropólogo que puso en primer plano la antropología del cuerpo, se jubila pero no abandona la investigación. Le Breton creció en Le Mans en un entorno de clase trabajadora. Estudió sociología, psicología y lingüística en la Université de Tours. Tras un recorrido a pie y en autostop por Brasil en plena dictadura, durante el cual escribió todos los días, decidió convertirse en un sociólogo comprometido, pero sin militancia. «Ser militante es limitar», considera Le Breton, que ve en su trabajo una forma de «deslimitar» el mundo: «Mostrar que nunca somos prisioneros de nuestras formas de ser, de nuestra cultura». Y agrega: «Defiendo la independencia de pensamiento y la conciencia de la infinita complejidad del mundo».
Tras completar su tesis de licenciatura sobre el cuerpo, Le Breton realizó una especialización en psicopatología y presentó su tesis doctoral. Tras enseñar sociología en Mozambique, tuvo un camino profesional complicado en Francia, donde en aquella época la sociología del cuerpo no estaba muy reconocida, puesto que este era considerado un tema biológico. Le Breton cuenta que se ganaba la vida impartiendo cursos de antropología en escuelas de enfermería, de gestión y de trabajo social hasta que se establece finalmente como profesor en la Université de Strasbourg,
Cada tema que le interesa es el resultado de una necesidad interior: «un deseo de cuestionar prácticas que me perjudican, que me molestan…», como bien lo precisa en una entrevista reciente para Savoir(s), periódico de la Universidad de Estrasburgo. Lo mismo sucede con su trabajo sobre el riesgo: «Salí de conductas de riesgo, vi desaparecer amigos por las drogas, quise entender. He escrito un libro que me hubiera gustado leer cuando tenía 16 o 17 años y que me hubiera ilustrado sobre mis «juegos» de entonces».
La cara, la risa, la voz, el dolor, el cuerpo, el sufrimiento de los adolescentes, la extirpación y el trasplante de órganos y tejidos…: «Me vi envuelto en muchos de los debates de la sociedad». David Le Breton propone, de esta manera, un enfoque antropológico del dolor: «Un dolor sufrido, una tortura, un accidente… duele, mientras que un dolor elegido, en el deporte, un tatuaje… provoca un sufrimiento mínimo».
Otra pasión de Le Breton es la enseñanza: «Me considero un acompañante de los alumnos. Para mí, la transmisión de conocimientos es fundamental, es lo que más voy a echar de menos», dice. ¿Algún consejo?: «Veo que la cultura general está desapareciendo con el uso de Internet. Los que tendrán éxito son los que leen, viajan, van al cine… No se puede hacer sociología sin curiosidad».
Aunque jubilado, el antropólogo continuará trabajando y ya tiene la agenda llena. Por el momento no hay una conclusión a su carrera, como tampoco la hay en los libros que ha publicado: «Nunca concluyo, dejo que el mundo respire. No tengo la última palabra, quiero entender, acercarme al objeto sabiendo que se me escapa».
David Le Breton es autor de una cuarentena de libros, entre ellos el influyente Anthropologie du corps et modernité, publicado por primera vez por Presses Universitaire de France (1990, última edición en 2019). Sus últimos libros son: Les jeunes au volant (2022, Eres), Sourire: Anthropologie de l’énigmatique (2022, Métailié) ; En roue libre: Anthropologie sentimentale du vélo (2020, Terre Urbaine), Marcher la vie: Un art tranquille du bonheur (2020, Métailié), Rire: une anthropologie du rieur (2018, Métailié), Tenir: Douleur chronique et réinvention de soi (2017, Métailié), Disparaitre de soi: Une tentation contemporaine (2015, Métailié), Sociologie du risque (2017, PUF), Expériences de la douleur: Entre destruction et renaissance (2010, Métailié), Éclats de voix: Une anthropologie des voix (2011, Métailié) et Marcher: Éloge des chemins et de la lenteur (2012, Métailié). Sus libros han sido traducidos a más de 80 idiomas.
Coeditó además el Dictionnaire de l’adolescence et de la jeunesse en Presses Universitaires de France, editó 17 obras colectivas y publicó 228 capítulos de libros y 176 artículos revisados por pares. Es miembro del consejo editorial de más de 15 revistas científicas y de muchos otros comités científicos y estructuras administrativas. Recibió un doctorado honoris causa de la Escuela Nacional de Estudios Políticos y Administrativos de Bucarest (Rumanía) en 2019, y del Centro de Estudios Latinoamericanos de Educación Inclusiva (CELEI, Chile) el 10 de diciembre de 2020.
En Chile ha publicado Cuerpo sensible (Metales Pesados, 2005), La edad solitaria: Adolescencia y sufrimiento (LOM, 2012) y Antropología del dolor (Metales Pesados, 2020).
Fuente y más información: Université de Strasbourg – Communiqués et dossiers de presse.