«Me siento honrado y encantado de tener esta nueva oportunidad de continuar y desarrollar aún más mis antiguas y muy fructíferas colaboraciones con mis numerosos colegas del CNRS», afirma Saul Perlmutter. Ganador del Premio Nobel de Física en 2011 por su descubrimiento¹ del fenómeno de la expansión acelerada del Universo, el cosmólogo estadounidense es uno de los diez primeros científicos de muy alto nivel invitados a convertirse en miembros-embajadores del CNRS.
Anclado en la tradición de los “profesores visitantes” eminentes en el seno del mundo académico, este dispositivo novedoso para el CNRS persigue dos objetivos complementarios. Por un lado, «la calidad de los científicos de talla mundial que conseguimos atraer demuestra el atractivo del CNRS, más allá del simple discurso», afirma Alain Schuhl, Director General de Ciencia del organismo.
Por otra parte, el programa pretende impulsar la investigación francesa: «Podemos aprovechar la influencia y la reputación del CNRS para atraer a los mejores científicos del mundo», explica Alain Schuhl. Estos prestigiosos investigadores e investigadoras, invitados a partir de propuestas de los institutos del CNRS, se comprometen a pasar al menos un mes al año, durante tres años, en uno o varios laboratorios de Francia.
«Al tener una presencia permanente en un laboratorio, un miembro-embajador se hace más accesible y está disponible para interactuar con los investigadores franceses sobre cuestiones científicas y, más en general, sobre la forma en que se lleva a cabo la investigación», explica Reynald Pain, Director del Instituto Nacional de Física Nuclear y Física de Partículas (IN2P3) del CNRS, que invitó a Saul Perlmutter. En particular, estas personalidades de alto vuelo podrán desempeñar un papel de acompañamiento, «de forma más espontánea, de jóvenes científicos y doctorandos que quizá no hayan tenido la oportunidad de conocerlos en una conferencia». «Muchos científicos extranjeros admiran el CNRS, su actividad científica y la excelencia de sus investigadores», añade el director.
Todos los embajadores de esta primera promoción ocupan puestos permanentes en el extranjero y mantienen importantes relaciones científicas con científicos franceses. Por ejemplo, Saul Perlmutter es codirector del Centro Pierre Binétruy, un Laboratorio Internacional de Investigación (IRL²) establecido entre el CNRS y la Universidad de California en Berkeley gracias a su acción. Alejandro Maass desempeñó un papel decisivo en el desarrollo, con la Universidad de Chile, del primer IRL de Chile, el Centro de Modelamiento Matemático (CMM). La astrofísica italiana Marica Branchesi, incluida en la lista de 2018 de las 100 personas más influyentes del mundo de la revista Time, está muy implicada en la colaboración Virgo y, en particular, en el instrumento Advanced Virgo, cofinanciado principalmente por el CNRS de Francia y el Istituto Nazionale di Fisica Nucleare (INFN) de Italia. Otro ejemplo: la francesa Anne L’Huillier es profesora en la Universidad de Lund (Suecia) y ha ganado numerosos premios por sus trabajos en física atómica.
Directora del Centro de Estudios sobre Patrimonio y Museos de la Universidad Nacional Australiana, Laurajane Smith está especializada en el estudio de la politización del patrimonio, un tema importante para la antropología, que es una prioridad científica para el Institut des sciences humaines et sociales (INSHS) del CNRS. «La política internacional del CNRS es un elemento esencial de su identidad», afirma Marie Gaille, directora del Instituto. Así, la investigación que se lleva a cabo en el CNRS está «muy internacionalizada» –⅔ de las co-publicaciones del CNRS son en colaboración con un laboratorio extranjero– y muchos científicos tienen «vínculos fuertes y estructurantes para su investigación y a largo plazo con colegas extranjeros». «Siguiendo la estela de los colegas extranjeros que manifestaron su adhesión a la institución durante las celebraciones del 80 aniversario del CNRS en 2019, este sistema más sostenible de vínculos a nivel internacional permitirá subrayar la importancia de este tipo de relaciones», explica Marie Gaille.
Este sistema selectivo debería permitir al CNRS acceder cada año, una vez acumuladas las primeras promociones, a 30 científicos reconocidos internacionalmente, al servicio de su comunidad científica y de su reputación.
Los 10 «fellows-ambassadors» de 2023:
- Marica Branchesi, astrofísica, Gran Sasso Science Institute, Italia
- Francesco dell’Isola, investigador en mecánica teórica, Università degli Studi dell’Aquila, Italia
- Maurice Herlihy, informático, Brown University, EE. UU.
- Anne L’Huillier, física atómica, Universidad de Lund, Suecia
- Alejandro Maass, matemático, Universidad de Chile, Chile
- Krzysztof Matyjaszewski, químico de polímeros, Universidad Carnegie Mellon, EE. UU.
- Leonid Alex Mirny, biofísico, Harvard, EE. UU.
- Jeffrey F. Morris, catedrático de Ingeniería Química, City College de Nueva York, EE. UU.
- Saul Perlmutter, físico, Universidad de California, Berkeley, EE. UU.
- Laurajane Smith, investigadora en Estudios del Patrimonio y Museos, Australian National University, Australia
Notas
- Con Brian P. Schmidt y Adam Riess.
- Estos instrumentos estructuran en un lugar determinado la presencia significativa y duradera de científicos procedentes de un número limitado de instituciones de investigación francesas y extranjeras (de un solo país socio extranjero).
Fuente: CMM / publicada originalmente en francés por CNRS Info.